¿Conocéis la cascada de Diablozulo? Es un bonito salto de agua de unos 5 m. de caída localizado entre las localidades de Yárnoz y Monreal.
El acceso a la misma es un sencillo y bonito paseo desde cualquiera de los dos pueblos. En esta ocasión, salimos desde Yárnoz.
Aparcamos el coche en la explanada que hay entre la iglesia y la torre y continuamos andando por esa misma calle hacia arriba. Justo después de la iglesia el camino se divide en tres, y para llegar a la cascada hay que tomar el camino de la izquierda (hay otro sendero un poco más abajo, también a la izquierda por el que llegaremos al mismo sitio, pero en éste, no hay puente para cruzar el riachuelo).
Avanzamos por el sendero que discurre entre la montaña a la derecha y campos de cultivo a la izquierda y empezamos a oír el sonido del agua. Tras cruzar un puente de madera sobre un riachuelo, subimos las escaleras que hay a continuación y continuamos por el camino.
Pasamos junto a un mojón con el símbolo del Camino de Santiago y seguimos hasta que el sendero se ensancha y discurre entre campos de cultivo. Justo antes de que el camino pase por encima del riachuelo, debemos girar a la derecha. Ya oímos el sonido del agua, así que la cascada está cerca.
Continuamos por el camino que hay entre la regata y la pieza sembrada y cuando éste termina, giramos a la izquierda llegando ya a la cascada.
La distancia desde Yárnoz es de poco menos de un kilómetro y medio, por lo que el trayecto total no alcanza los 3 km y apenas presenta desnivel.
Esta cascada sólo tiene agua en época de lluvia o deshielo, así que la primavera es una época genial para visitarla. Esto hace también que alguna parte del camino esté embarrado, así que hay que llevar calzado adecuado.
Toca disfrutar del campo y el aire libre.