Ya está aquí la primavera y las aves están buscando un hogar para formar su familia… Vamos a intentar ayudarles proporcionándoles un refugio para que puedan criar a sus polluelos más fácilmente.
Necesitaremos:
- Dos tetrabricks
- Pistola de silicona caliente
- Tijeras/cutter
- Palos
- Cuerda
Los primero que hay que hacer es salir a dar un paseo por un parque o bosque próximo a casa y recoger palos para cubrir la casita por fuera. Así será más fácil que una parejita de pájaros la ocupe. Podéis recopilar también otros tipos de materiales proporcionados por la naturaleza, como cortezas, piedritas, hierba seca, etc.
Una vez en casa, hay que recortar la entrada a la casita. Tenéis que hacer un círculo de unos 5- cm de diámetro a 10-15 cm del fondo del tetrabrik, ya que tenemos que dejar espacio por debajo de la entrada para que construyan su nido. Además, a uno o dos cm de la entrada hay que hacer un orificio (corte en forma de cruz) para insertar un palo y que puedan posarse.
Cogemos el otro tetrabrick y recortamos el tejado para la casita. Según la forma que tenga el tetrabrick que utilicéis, tendrá unas medida u otras. Aprovechad el doblez para que sea la parte superior del tejado. En el centro de la parte superior del tejado, hay que hacer otro agujero para meter una cuerda (antes de pegar el tejado) y poder colgar la casita en la rama de un árbol. A la hora de pegar el tejado al tetrabrick, hacedlo con la parte que estaba en el interior hacia fuera, así conseguiremos que al llover sobre la casita, el agua resbale.
Pegamos el tejado y el palito de la entrada con la silicona caliente (cuidado con los peques porque quema). Si no tenéis pistola, probado con algún otro pegamento como silicona líquida (se usa para pegar goma-eva). Y ahora solo queda ir pegando los palitos por la superficie de la casita para al colgarla el un árbol quede más disimulada y «natural».
Colgad la casita en un árbol próximo a casa y así podríes controlar si alguna pareja de pájaros la ocupa o no…
¡Animaos a hacerla!
